Lo echo de menos pero...

Posted: sábado, 24 de julio de 2010 by Miguel (Candy) in Etiquetas:
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No lo voy a negar. Esta semana mi mente ha viajado más de una vez a ese monasterio de Burgos por el que tantos veranos he pasado mi tercera semana de Julio. Muchas veces preguntándome como le irá a esa gente tan especial para mí que se encuentra ahora mismo en aquel lugar, y otras veces simplemente añorando antiguos momentos. Momentos que forman parte de mi pasado y no voy a negar que los guardo con un especial cariño en mi corazón PERO... también ha llegado la hora de pasar página, dejar paso a esos nuevos jóvenes que tienen tantas ganas de hacer cosas. No me gustan las cosas que se eternizan, que no cambian en 6 años. Tampoco quiero cometer el error de pensar que ya lo sé todo, que estoy curado en salud frente a cualquier cosa y que ya poco puede sorprenderme, NO. Simplemente creo que es el momento perfecto de vivir mi FE con mayúsculas. De dar testimonio en mi comunidad y si algún día se me necesita ¿Por qué no volver al Espino? PERO no es mi prioridad, ya no necesito una semana de reflexión para aclarar mis cosas, creo que ya las tengo suficientemente claras.

A estas horas estará todo el mundo vestido de blanco celebrando con alegría cual sábado santo la fiesta de la vigilia. Se que suena cursi pero en cierto modo me siento parte de aquella fiesta. Estaré mientras Tony baila su Caramel Dansen" o mientras las mejores recepcionistas del espino danzan al sol de "Yo quiero bailar"...

Mañana todo habrá acabado y volverán "pa" Sevilla cargados de buenos recuerdos y anécdotas que escucharé con algo de envidia pero consciente de que hice lo que debía cuando decidí no ir este año con ellos.

Sueño de una noche de verano

Posted: jueves, 15 de julio de 2010 by Miguel (Candy) in
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Hace un mes escribí sobre lo que comenzaba, el mundial de fútbol. Hoy escribo sobre lo que acaba y el sueño tan feliz que tuve aquella madrugada del 11 de Julio...

Soñé con 11 guerreros, que digo 11, 23 gladiadores que peleaban en busca de la gloria. ¿Gloria personal? No creo que sea de esas historias. Me pareció ver como aquellos guerreros devoraban al fiero oponente uno tras otro hasta erigirse campeones.
La otra noche soñé con bebés, niños, jóvenes, adultos y ancianos emocionarse y vibrar. Gritar hasta quebrar la garganta y llorar al ver el preciado trofeo dorado en manos del comandante general de su armada invencible.
La otra noche soñé con una nación más unida. Ni rastro de "las dos Españas" que tanto se alude en la literatura nacional. Sólo existía un país, orgulloso, por una vez, de ser él mismo.
Soñé ríos de banderas rojigualdas inundando las tierras del Ebro, del Tajo, del Guadalquivir o del Duero. Calles, plazas y fuentes repletas de estruendo y glorioso jolgorio.... ¡bendito jolgorio!
La otra noche soñé que por una vez que cenicienta era la más guapa por un rato. Que un pequeño país puede hacer cosas grandes. Soñé que el espíritu y el afán de superación a veces son suficientes para lograr bastos objetivos.
La otra noche soñé con una esfera de cuero que hacía feliz a millones de personas con tan sólo entrar entre tres maderos. ¡No entiendo nada!
La otra noche soñé como la historia era reescrita. Los fantasmas del pasado se fueron por la ventana abierta impregnada de nuevos aires. Algo ha cambiado...

La otra noche soñé que era feliz, que mi padre lloraba también de felicidad, que mi vecino era feliz, que el de más allá también lo era... soñé que la felicidad es tan fácil y a la vez tan difícil de encontrar que no quise despertarme y aún sigo soñando. ¿Para cuando despertaré? Dímelo tu....